PASTEL CREMOSO DE LECHE

 

Este pastel cremoso de leche tiene una textura suave y un delicioso sabor, está a medio camino entre un flan y una tarta de queso, así que tiene el éxito asegurado.

Se elabora con ingredientes básicos de la cocina: leche, huevos, mantequilla, azúcar, harina y vainilla  y su preparación es muy sencilla y rápida, puedes hacer la mezcla a mano y te evitas limpiar la batidora eléctrica.

Lo mejor de este pastel cremoso de leche, es su textura suave y su delicioso sabor a vainilla. Puedes tomarlo solo o espolvorear la superficie con un poco de azúcar glas y canela molida. Yo he preferido servirlo con fresas y arándanos porque la combinación es deliciosa.

RECETA DE PASTEL CREMOSO DE LECHE:

 

INGREDIENTES:

• 800 mililitros de leche
• 250 gramos de harina de trigo para todo uso
• 230 gramos de azúcar
• 5 huevos grandes (tamaño L)
• 50 gramos de mantequilla derretida
• 1 cucharada de extracto de vainilla
• 1 pizca de sal

 

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¿CÓMO SE HACE EL PASTEL CREMOSO DE LECHE?

PREPARACIÓN:

1. 1. Precalienta el horno a 175 ºC (350 ºF) con calor arriba y abajo.
   2. Para esta receta he usado un molde desmontable de 22 centímetros. He puesto papel de hornear en la base del molde y en las paredes, aceite y una capa uniforme de harina. La masa de este pastel queda muy líquida, así que para garantizar que no hubiera ninguna filtración, he forrado la base del molde con papel de aluminio.
   3. En un bol mezcla los ingredientes secos: harina, azúcar y sal. Reserva.
   4. Calienta la leche y justo antes de hervir agrégale la vainilla. Reserva
   5. Añade los 5 huevos a los ingredientes secos e incorpóralos con ayuda de una espátula o un batidor de varillas, hasta tener una mezcla uniforme.
   6. Agrega la mantequilla fundida y mezcla hasta que se haya integrado.
   7. Incorpora la leche caliente y mezcla muy bien hasta que tengas una masa fluida.
   8. Pon la mezcla en el molde y hornea entre 45 y 50 minutos, hasta que cuaje y tenga un bonito color dorado. No te preocupes si la mezcla se mueve ligeramente en el centro, al enfriarse se hará más densa.
   9. Apaga el horno y deja reposar el pastel 5 minutos antes de sacarlo.
   10. Retira el molde del horno y deja enfriar por completo el pastel antes de desmoldarlo.
   11. Una vez desmoldado, puedes poner el pastel en la nevera un par de horas antes de servirlo. También puedes prepararlo el día anterior y dejarlo toda la noche en la nevera.
   12. Al momento de servirlo, acompáñalo con frutos rojos: fresas, arándanos o frambuesas con los que combina de maravilla.

MIS RECOMENDACIONES:

• Recuerda que el tiempo de horneado puede variar dependiendo de tu horno y del tamaño del molde que uses. Yo utilicé un molde de 22 centímetros, el pastel quedó con una altura de 4,5 centímetros y estuvo en el horno cerca de 50 minutos. Si horneas el pastel en un molde más grande, necesitará menos tiempo de horneado.
• Es importante no pasarse con el tiempo de horneado, así aseguras que el pastel quede con una textura cremosa. Si lo horneas demasiado la textura se hará más densa.
• Puedes servir el pastel solo, espolvoreando la superficie con un poco de azúcar glas y canela o acompañándolo de frutos rojos o con tu mermelada favorita.
• El pastel se conserva en la nevera de 2 a 3 días. Guárdalo en un recipiente con tapa o envuelto en film de cocina.

 

Si tienes cualquier duda sobre esta receta, puedes escribirme. Debajo de la receta encontrarás la sección de comentarios, estaré encantada de responderte.

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