Como todos los años, traigo una receta especial para todos los que quieren endulzar San Valentín, con un delicioso postre. Para mí esta fecha sabe a fresas y chocolate, por eso he preparado esta preciosa Tarta con fresas y chocolate para San Valentín.
Poco a poco comienzan a aparecer las fresas en el mercado y os confieso, que es mi fruta favorita. Me encantaría poder disfrutarlas todo el año, como sucedía cuando vivía en Colombia. Pero aquí en España, no puede ser por las estaciones y hay que esperar con paciencia su temporada, que suele ir de enero hasta finales de mayo.
Las fresas y el chocolate siempre se llevan bien, porque combinan a la perfección y en esta receta, van de la mano de un esponjoso bizcocho genovés.
Esta tarta esta formada por tres capas de bizcocho genovés, muy fácil de preparar. El secreto está en batir mucho los huevos y el azúcar, para que quede con una textura muy esponjosa y como sabréis, no es necesario agregarle levadura química (polvo de hornear).
El relleno es una deliciosa crema de trufa de chocolate, que se prepara tan sólo con tres ingredientes: chocolate, nata y azúcar y queda con una textura suave pero consistente, ideal para rellenar esta tarta y para decorarla usando una manga pastelera.
Por último usaremos fresas muy maduras, que darán el punto de color y frescura a la tarta.
Espero que disfrutéis esta receta y os deseo un feliz y dulce día de San Valentín.
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1. Para hornear el bizcocho, he utilizado un molde desmontable de 22 centímetros, cubrimos la base y las paredes del molde con papel de hornear o le ponemos mantequilla a todo el interior y luego le espolvoreamos harina de manera uniforme. Este bizcocho crece bastante, así nos aseguramos de que no se pegue al molde y el desmoldado sea perfecto.
2. Precalentamos el horno a 175ºC (350ºF) con calor arriba y abajo.
3. Combinamos los huevos, el azúcar y la pizca de sal en un recipiente y con la batidora eléctrica, batimos a velocidad alta, hasta que estén muy cremosos. Deben triplicar su tamaño aproximadamente, así que hay que batir sin prisas, alrededor de unos 10 minutos.
4. A continuación, agregamos el extracto de vainilla y la ralladura de limón o de naranja y mezclamos nuevamente.
5. El último paso, es agregar poco a poco la harina previamente tamizada e ir integrándola usando una espátula y con movimientos envolventes, para mantener el volumen de la mezcla. Este es el secreto para que el bizcocho quede muy esponjoso.
6. Vertemos la mezcla en el molde y lo llevamos al horno de 40-45 minutos, hasta que la superficie tenga un color dorado uniforme y al introducir un palillo en el centro del bizcocho, salga limpio.
7. Cuando esté listo el bizcocho lo retiramos del horno. Desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
1. Lo primero que debemos tener en cuenta, es que la crema de chocolate que usaremos para esta receta, debemos prepararla con antelación, porque necesita estar en la nevera como mínimo 6 horas, aunque mucho mejor, si se prepara desde el día anterior.
2. Ponemos a calentar la nata junto con el azúcar y en cuanto hierva, la retiramos del fuego.
3. A continuación, agregamos el chocolate partido en trozos y mezclamos hasta que el chocolate se derrita por completo.
4. Ponemos nuevamente la mezcla al fuego , mientras continuamos mezclando suavemente y en cuanto hierva la retiramos del fuego.
5. Dejamos enfriar la mezcla a temperatura ambiente. En cuanto este fría, la ponemos en un recipiente que podamos llevar a la nevera, la cubrimos con film plástico y la dejamos en la nevera como mínimo 6 horas.
1. Lavamos las fresas y las cortamos en láminas o en mitades. Reservamos.
2. Con ayuda de un cuchillo de sierra partimos el bizcocho en tres capas iguales. Mi bizcocho tenía una altura de 7,5 centímetros, así que lo corté en tres capas de 2,5 centímetros cada una.
3. La forma más fácil de cortar las capas iguales, es medir la altura en varios puntos en el contorno del bizcocho e ir poniendo una marca. Luego trazamos una linea alrededor con un cuchillo y sobre esa línea hacemos el corte.
4. Sacamos la crema de chocolate de la nevera y con una batidora eléctrica la montamos como si fuera nata, hasta que forme picos firmes. Ponemos una parte de la crema en una manga pastelera.
5. Para montar la tarta, tomamos una capa de bizcocho, con ayuda de una espátula la cubrimos con la crema de chocolate.
6. Pasamos la manga pastelera por todo el borde para formar un círculo y luego, en el centro ponemos las fresas partidas. Repetimos la operación con la segunda capa.
7. En la capa superior, cubrimos la superficie con la crema y luego con la manga pastelera, podemos decorar los bordes y en el centro, ponemos fresas en mitades y algunas frambuesas.
8. Dejamos reposar la tarta en la nevera hasta el momento de servirla, esto ayudará a mantener la textura de la crema de chocolate.
Y ya está lista, nuestra Tarta con fresas y chocolate para San Valentín.
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